Microbioma e inflamación articular: ¿el eslabón perdido?
La identificación de disbiosis durante patologías inflamatorias articulares plantea, evidentemente, la cuestión de su significado: ¿Causa o consecuencia? Los estudios de intervención necesarios para responder a esta pregunta todavía se limitan a los modelos animales en los que apuntan hacia una causalidad posible, con pérdida de especies microbianas comensales protectoras y exceso de especies proinflamatorias.
Para probar la causalidad y ofrecer nuevas soluciones terapéuticas, sería necesario corregir este desequilibrio en los pacientes. Varios enfoques son posibles: el más simple, sin duda insuficiente en muchos casos, es mejorar la higiene de vida, en particular alimentaria; el más radical es el trasplante de una microbiota eubiótica, cuyos prometedores ensayos en las enfermedades inflamatorias del intestino podrían llevar a extender la experimentación a las articulares.
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Maxime Breban Redactor jefe de este número